Cómo hacer un remo con barra
Como su nombre indica necesitamos una barra, puede ser de halterofilia, pero también nos valdría cualquier otra a la que podamos meter carga según vayamos mejorando.
Nos colocamos con los pies a la altura de las caderas y las punteras apuntando ligeramente al exterior.
Flexionamos ligeramente las piernas e inclinamos el torso, ¿cuánto? Lo habitual sería superar los 45º y luego ya dependerá del peso y de cómo controlemos el movimiento.
Al flexionar el torso nuestros glúteos, deben estar activados, así como el lumbar, espalda y core. Todo debe ser un bloque firme y alineado. La cabeza levemente levantada y con la mirada en el suelo, como a 2 metros de nosotros, así mantendremos las cervicales bien colocadas.
La barra la cogemos con las palmas hacia abajo, la separación dependerá de qué parte de la espalda queramos trabajar. Pero normalmente será como en una posición de cargada, como si separáramos de las caderas las manos una cuarta aproximadamente.
El tirón se debe ejecutar de forma controlada en todo momento, recordando que buscamos trabajar la espalda, esto implica evitar todo tipo de balanceos.
Tiramos con los codos ligeramente abiertos y hacia arriba. Las muñecas no cambian de posición, no “aceleramos la barra” como si fuera una moto. Retraemos escápulas y llevamos la barra al esternón bajo. No hace falta hacernos un masaje cardiaco con la barra, un leve roce será más que suficiente.
Para acentuar el movimiento, una vez lleguemos al punto más alto tratamos de mantener ahí la barra para luego descender de manera controlada. Es decir, no dejamos caer la barra con los brazos muertos. Esto nos podría causar todo tipo de lesiones en espalda, cuello, muñecas y codos.
En todos estos movimientos las piernas y espalda permanecen impávidas, no balanceamos ni la pelvis ni los brazos para ayudar en el tirón. Si debemos recurrir a esos movimientos adicionales es que el peso que llevamos es demasiado elevado.
Desde el principio hemos dicho que buscamos trabajar la espalda, no lo estropees haciéndote daño con un ejercicio que sirve para protegerla.